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>>/2790/ >>/2791/ < En Chester City Los agentes de Seguridad Nacional siguen hablando tranquilamente sobre sus cosas, entre ellas la vez en la que infiltraron a Eudie en un prostíbulo de cosplay para que pudieran obtener la confesión de un narcotraficante local el cual ya llevaba bastante tiempo escapando, todo eso ocurre mientras que Dredd está hablando con Fischl, a lo que Alexandra escucha y voltea levemente hacia el duo cuando el chófer ofrece la posibilidad de los agentes, aún así anda atenta por si al caso dicha posibilidad es llevada a cabo, por suerte para todos la posibilidad es descartada ampliamente y la judía que lleva más de mil años en este mundo no considera eso como algo factible a largo plazo... Mientras eso ocurre y la conversación va avanzando de manera lenta, todos los agentes voltean al escuchar que a Fischl le gritan puta loca y le hacen recordar lo que ocurrió el 1187 en Jerusalén o los libelos de sangre en la edad media... Alexandra no lleva tanto tiempo viva, pero si lo suficientemente como para saber que son los libelos de sangre, a lo que la pelirroja entiende que Fischl en ese caso lleva cientos de años viva, más de mil, fácilmente, de hecho haciendo cuentas rápidas, Fischl es mucho más longeva que Grace. Alexandra sonríe levemente cuando Fischl dice que no le tiene miedo al infierno. Pero bueno, las cosas siguen con normalidad y todos entran al vehículo Iba a comentar cosas, pero se que si lo hago nos vamos a atorar en la escena, así que lo haré más adelante. Ya adentro del vehículo, Lydia le quita los lentes a Michelle, dejándola tan ciega como Vilma cuando se le caen los suyos, Lydia aún los sigue teniendo puestos aunque la misma Michelle diga que se los entregue. Lydia: Claro que sabes que los tengo puesto, sentiste la dirección a donde fueron y fue a la mía... ¿Eh? Claro que me quedaban grandes tus brasieres, solo quería ver qué tan grandes, que entraras en ese momento a la habitación ya es otra cosa, pero éramos jóvenes e inexpertas, además, ya no te quitaría cosas, aunque tú tampoco te quedas atrás, no creas que no me acuerdo de la vez en la que usaste mis bragas o mis pantalones deportivos. Se inclina en su asiento mientras que Michelle mueve sus manos de un lado a otro, terminado en el toqueteo de Sury, quien le responde con un tono avergonzado. Creo que también es preguntar quienes son los demás... ¿Sury Cohen? Mi nombre es Lydia Estrada, y respondiendo quien soy, formó parte de la Dirección de Seguridad Nacional, la directora de dicha agencia, además que formo parte de la junta militar del gobierno Britanniano, por fuera de la familia real, obviamente. Y si, somos primas... ¿El Mossad? Que hijos de puta tan eficientes, tanto que muchos les tienen miedo. Lydia se quita los lentes y los deja en su mano, de igual forma aún no se los devuelve a Michelle. No me jodas, ¿Tienes la oportunidad de estar al frente? Tsss... Yo llevo tiempo sin que se me de la ocasión, no lo ha ameritado, lo más cercano a estar al frente es cuando tuve que salir a matar guerrilleros a las calles cuando hicieron un atentado a las oficinas principales... Pero eso de pasar, ir a otros lados y matar gente en una guerra o una operación de varios días, pues a decir verdad, no... Pura oficina y estrategias de despliegue... ¿Qué me trae por aquí? Más allá de que ayudamos a eliminar a la amenaza internacional, me interesa formar lazos con la agencia de inteligencia de este país... Para algunas cositas... Y si, se nota que te andas estresando mucho... ¿No tienes días libres? Ah, y toma. Extiende la mano hacia la de Michelle y le entrega los lentes nuevamente.