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> Jin Tokioka

Aquella pregunta por parte del joven estudiante dejo helada a Six la cual ahora se mostraba con bastante nerviosismo ya que no esperaba que Jin quisiera recuperar el dinero.

Yo... Yo...

De inmediato con un chasquido por parte de la misma Six, todo el nerviosismo de esta desapareció al mismo tiempo que empezaba a ofrecer algo similar a un servicio de ama de casa.

Trabajare para ti, eso, me encargare de lo que necesites en casa, limpiar, lavar, todo eso que los humanos aun no resuelven, te cobrare barato, ambos nos beneficiamos de esto ¿Cierto?

No era que Jin juzgara todo a primera vista pero era dolorosamente obvio que Six no haría nada de lo que había dicho incluso si la contrataba.

Ahora que lo pienso, si seré tu empelada necesitare mucha energía, tomare también algunos de estos.

Nuevamente con una excusa Six empieza agarrar aun mas comida chatarra entre las que se incluían donas como también bebidas energéticas, todo con la excusa de que necesitaría mucha energía.

Y donas, donas de estas.

Y con otra excusa Six siguió tomando aun mas comida aunque principalmente eran donas de diversas variantes.

La expresión de Jin empezó lentamente a volverse a una de cansancio dado lo ridículo de la situación por lo que avisaría que se detuviera aunque pronto sucedió algo.

Ups... Disculpa.

Al parecer choco con dos chicos de frente, siendo uno un pelirrojo con un sombrero mientras que el otro un rubio con varios pendientes.

En forma sencilla parecían universitarios aunque también la palabra gigolo les encajaría como anillo al dedo.

Mi culpa, debí tener mas cuidado.

Jin se mantuvo atento a ambos chicos aunque por lo menos por ahora habían reaccionado de buena manera aunque pronto de uno de estos salió una sencilla pregunta hacia Six.

¿Qué llevas ahí?

Con total inocencia Six les mostro a ambos la caja de donas que llevaba ahora en sus manos.

Mi jefe Jin me comprara unas donas como paga.

Ambos chicos se mostraron extrañados al mismo tiempo que dirigían su mirada sobre el joven estudiante.

¿Te paga con dulces?

Six asintió nuevamente con inocencia, viéndolo desde su mundo como un pago mas que correcto aunque como respuesta ambos chicos se rieron.

Nosotros podemos pagarte mas que el.

Jin pensaba que Six tendría el mínimo sentido común para saber que eso era un engaño burdo de ambos universitarios.

Como si todo lo malo le sucediera a Jin, Six empezó a preguntar por la oferta de ambos universitarios.

¿Es eso cierto?

Con una voz totalmente confiada y con una naturaleza digna de un Don Juan el chico rubio hablo.

Claro, somos el tipo de chicos justos, te compraremos el doble de los dulces que te ofrece ¿Suena bien?

Parte (1/2)
Perdón por los turnos tan largos OP.